No lo diga tan fuerte
Nasrudin estaba sufriendo de lo que parecía ser un caso notorio de ataque de nervios. Venía de un largo período de salud quebrantada y decidió finalmente llamar al doctor.
—Esta usted en graves problemas, dijo el doctor. Esta viviendo con un mal terrible; algo que lo esta posesionando desde la mañana hasta la noche. Debemos de encontrar lo que es, y destruirlo.
—Shhh, doctor, está completamente en lo cierto, pero no lo diga tan fuerte, ella está sentada en el otro cuarto y lo puede oír.
lunes, 3 de agosto de 2009
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