Un charlatán en la plaza del pueblo donde vivía Nasrudin, pretandía que por medio de cierta 'técnica relámpago', podía enseñar a leer a cualquier analfabeto.
Nasrudin salió de entre la muchedumbre:
—Enséñame a leer. Ya mismo.
El charlatán le tocó la frente mientras recitaba una extraña fórmula
y dijo:
—Ahora vete a casa de inmediato y lee el primer libro que encuentres.
Al poco rato volvió Nasrudin corriendo a la plaza, trayendo un libro en la mano y buscando al charlatán que ya había continuado su camino.
—Bueno, poco importa, porque en este libro he leído que es imposible aprender a leer instantáneamente y que si alguien opina lo contrario ¡es un impostor!
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