martes, 18 de octubre de 2011

Nasrudin.

Solicitud de préstamo

—Si pudieras ayudarme Nasrudin, hermano mío, necesito doscientas monedas de oro, a devolver a los tres meses.
—En parte; respondió el Mullah, solamente puedo acordar la mitad de tu solicitud de préstamo.
—Bien, asintió el amigo, seguramente pueda conseguir las otras cien monedas de oro en otro lugar.
—No me has entendido bien, explicó Nasrudin, en cuanto a las cien o doscientas monedas de oro, me es imposible complacerte. Sólo puedo acordar la mitad de tu solicitud, la que se refiere al tiempo, o sea a los tres meses.

4 comentarios:

  1. No vuelvas a ser la cabeza hacia abajo
    Nunca te rindas y no te preocupes.
    Encontrar otro camino a seguir.
    Y no oran cuando llueve,
    Si no oramos, cuando el sol está brillando.

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